El Día de la Pachamama "Madre Tierra" (del aymará pacha = "tierra" y por extensión actualmente se considera "mundo" "cosmos" y mama = "madre") es una tradición precolombina que se extiende en el tiempo sin contradicciones con el mundo católico, tendrá su celebración el 1º de Agosto, en especial entre los pueblos andinos, centrándose en Jujuy, es en este dia que se ofrece el tributo o "challa" donde personas de todas las condiciones sociales dan de comer a la Pachamama, para lo que preparan el plato preferido de la familia, se compra cigarrillos, hojas de coca en estado natural, vino o alcohol, y algún dinero como otra de las ofrendas.
En algún lugar de la casa donde haya tierra, aun una maceta, se cava un pozo, donde cada uno de la familia debe poner las ofrendas, para dejar al último el plato con la comida, que naturalmente debe ser el mejor servido para congraciarse con la Pachamama, que "todo lo da y todo lo quita en esta vida terrenal", en señal de agradecimiento y para pedirle la buenaventura para el año venidero.
Así como el 21 de junio se celebró el Día del Inti Raymi, o culto al sol, ahora se homenajeará a la Madre Tierra, en coincidencia con la actividad agrícola, porque ya las comunidades indígenas comenzaron la ruptura de la tierra, preparándola para la siembras para los cultivos.
Durante todo agosto, la celebración se incorpora a la vida cotidiana, en especial por la sahumada (ceremonias de sahumerio), con la que se procura alejar los "malos espíritus" de las pertenencias más queridas, que incluyen a las personas.
Todo esto tiene su preparativo, que se ve en los pequeños comercios ambulantes y fijos, que venden los sahumerios de distintos tamaños, preparados con hierbas aromáticas, yerba, lana de oveja de colores y cebo de velas, con figuras de casas, coches y el signo peso, entre otros pedidos, confeccionados en yeso.
En el mundo andino, se cree que si se rinde homenaje a la Pachamama, habrá un año sin mayores problemas económicos y de salud, y aunque los hubiera, la Madre Tierra sabrá mitigarlos, y además se supone que quien pasa el mes de agosto, considerado el más aciago, podrá estar bien todo el año.
El temor a las desgracias, sobre todo en la salud, se debe a que para esta época comienza a correr el viento norte, equivalente al zonda en la zona cuyana, cuyas características son un aumento de la temperatura o falso verano, y carencia de humedad, que sienta muy mal a las personas con problemas cardíacos y a hipertensos.
En las zonas rurales, en estos días también se acostumbra a marcar a los animales, consagrarlos a la Pachamama y sacrificar algunos de ellos para preparar la comida y agasajarla, además de marcarlos y distribuir las crías de las pariciones anteriores.
Agosto es el mes de la Pachamama y para los pueblos andinos, es un mes de fiesta, pero también para armonizar la relación del hombre con la naturaleza.
Quizás no sea usted perteneciente al pueblo andino, ni cultor de la pacha mama, pero la idea de armonizarse con la naturaleza, de agradecerle lo recibido, y esperar que nos conceda bondades en el futuro, de darse cuenta que la naturaleza está allí y somos parte de ella, es sin duda una buena idea, que podríamos poner en práctica, que podríamos copiar, en lugar de tanta idea-basura que nos llega a través de los medios desde otros paises del primer mundo.
Al fin y al cabo, todos terminaremos siendo naturaleza.
C.I.E.A.O.