El principal componente de HAARP es el Instrumento de Investigación Ionosférica (IRI), un calentador ionosférico, se trata de un sistema transmisor de alta frecuencia (HF) utilizado para modificar temporalmente la ionosfera. El estudio de estos datos aporta información importante para entender los procesos naturales que se producen en ella.
Durante el proceso de investigación ionosférica, la señal generada por el transmisor se envía al campo de antenas que la transmiten hacia el cielo. A una altitud entre 100 y 350 km, dicha señal se absorbe parcialmente, concentrándose en un volumen de unos cientos de metros de altura y varias decenas de kilómetros de diámetro sobre el lugar.
La intensidad de la señal de alta frecuencia en la ionosfera es de menos de 3 µW/cm2, decenas de miles de veces más pequeña que la radiación electromagnética natural que llega a la Tierra procedente del Sol, y cientos de veces menor que las alteraciones aleatorias de la energía ultravioleta (UV) que mantiene la ionosfera.
Sin embargo, los efectos producidos por HAARP pueden observarse con los instrumentos científicos de las instalaciones antes mencionadas, y la información que se obtiene es útil para entender la dinámica del plasma y los procesos de interacción entre la Tierra y el Sol.
Es importante decir que HAARP que estaba en condiciones de comenzar a trabajar plenamente desde 2006, ya no es el único en el mundo.
Sala de control.
Antes de exponer algunas teorías y opiniones adversas, hemos realizado 2 preguntas a HAARP, de las cuales no recibimos respuestas.
Las preguntas que hicimos fueron :
1) Es posible conocer los nombres de los científicos que dirigen el proyecto?.
2) Es posible que HAARP genere ondas que podrían afectar a los seres humanos?.
La primera pregunta se hizo porque curiosamente no se mencionan los nombres de los responsables del proyecto.
En la mayoria de los proyectos científicos figuran los responsables, ya que de haber un descubrimiento importante que beneficie a la humanidad esos científicos tendrían el mérito por ello que podrían agregar a sus curriculums y talvés obtener el premio Nobel (cosa que los científico anhelan, aunque no se dan premios por desarrollo de armas, talvés sea este el caso).
La segunda pregunta es obvia, ya que esperabamos un rotundo NO, pero no fue asi "quien no responde, no miente".
Cuando HAARP comenzó, era un proyecto secreto hasta que el científico Nick Begich junto a la periodista Jeanne Manning realizaron una profunda investigación sobre el tema y escribieron el libro "Angels don't play this harp" (Los ángeles no tocan esta arpa), en el que ambos autores plantean inquietantes hipótesis, una de ellas es que de ponerse en marcha dicho proyecto podría tener peores consecuencias que las pruebas nucleares.
Luego del alboroto que causo este libro, parece que decidieron hacer el viejo truco de los magos, que muestran al público sus manos por ambos lados para que se convenzan de que no hay nada extraño en ellas, cuando lo que van a sacar lo tienen en la manga.
Ustedes pueden ver las fotografias de todas las instalaciones de HAARP, y alli no hay cañones, ni bunkers, ni misiles, ni siquiera armas, porque lo que emite HAARP son ondas electromagnéticas, invisibles al ojo humano.
Lo peligroso en este caso es lo que no se ve, y es lo que contienen las computadoras y los cerebros de los científicos que trabajan allí, es por eso que no se dan sus nombres.
Vista panorámica de área de antenas.
Resolución del Parlamento Euopeo :
En su resolución de 28 de enero de 1999 sobre medio ambiente, seguridad y política exterior (A4-0005/1999), el Parlamento Europeo señalaba que el programa HAARP manipulaba el medio ambiente con fines militares y solicitaba que HAARP, puesto que planteaba un problema de envergadura mundial (apartado 24), fuese objeto de una evaluación por parte de STOA en lo que se refería a sus repercusiones sobre el medio ambiente local y mundial y sobre la salud pública en general.
En esa misma resolución del Parlamento Europeo, se pide que se celebre un convenio internacional para la prohibición mundial de cualquier tipo de desarrollo y despliegue de armas que puedan permitir cualquier forma de manipulación de seres humanos.
Esta resolución indica que existe la posibilidad de que este tipo de instalaciones puedan ser dañinas no solo para el medio ambiente, sino también para los seres humanos.
Pero 10 años más tarde de esa resolución, HAARP sigue alli y ya hay otros paises que tienen instalaciones similares.
C.I.E.A.O.
Continuará...