El vinagre de manzana es muy beneficioso para la salud, pues tiene una potente combinación de sales minerales, materias orgánicas y ácido acético. Es muy rico en potasio, y también contiene fósforo, cloro, sodio, magnesio, calcio, azufre, hierro y flúor.
Aquellos que tengan unas necesidades especiales de potasio como las personas mayores, quien tome medicamentos diuréticos, o padezca de retención de líquidos deben tomar vinagre de manzana habitualmente.
También en caso de agotamiento, enfermedades cardíacas y para evitar el endurecimiento de la pared arterial.
Eso sí, no a todo el mundo le conviene: quienes padecen úlceras gástricas, gastritis, estreñimiento o problemas intestinales deben abstenerse o tomarlo en pequeñas dosis.
El vinagre de manzana tiene muchísimos usos.
Agregándole un poco a las legumbres, éstas se hacen más digestivas y mantecosas.
Añadiéndolo en nuestras comidas, favorecemos la regeneración de la flora intestinal, mejoramos la digestión facilitando la absorción de nutrientes y reforzamos nuestro sistema inmunológico. También es un magnífico limpiador de ollas de aluminio y de los cristales.
Con 2 cucharadas de vinagre de manzana diluidas en medio vaso de agua podemos hacer desaparecer la aerofagia y algunos problemas digestivos.
Asimismo, con esa misma proporción tres veces al día combatimos los calambres, que se producen por falta de potasio.
Añadiéndole a esas 2 cucharadas de vinagre en medio vaso de agua una pizca de bicarbonato de sodio y haciendo gárgaras dos veces al día durante 2 o 3 jornadas se elimina la laringitis, el dolor de garganta, la afonía o la tos; las bacterias que provocan las enfermedades de garganta no soportan un medio ácido como el vinagre.
En enjuagues bucales, el vinagre de manzana mejora las llagas y los hongos en la boca, y reduce la formación de sarro.
Para los hematomas, se aplica directamente sobre ellos una compresa empapada en vinagre de manzana.
Para el insomnio, medio vaso de agua templada con 2 cucharadas de vinagre de manzana y 1 cucharada de miel de azahar.
Lo tomamos media hora antes de acostarnos.
Y para las varices, si empapamos en vinagre unas vendas y las ponemos en la heladera, por la noche nos las podremos colocar en las piernas notando su efecto muy rápidamente.
E.M.Y.O.Y.